Dani Martín

El día que Dani Martín salió con vestido de encaje al escenario ¡Fuera prejuicios!

Noelia Bertol

Lo que me dé la gana es mucho más que el nombre que Dani Martín dio a su último trabajo discográfico. Es un estilo de vida, el que sigue el artista, y que se basa en disfrutar de la vida haciendo lo que se quiere sin importar el qué dirán.

Quien ha seguido la trayectoria de Dani Martín sabe que esta idea le lleva acompañando siempre. Comenzó una carrera en solitario tras el fin de El Canto del Loco, desafió a todos aquellos que le llamaron «ñoño» con maravillosas baladas y, aquí llega la última, se plantó un vestido para saltar al escenario a cantar Paco y Carmela con Ginebras

Porque hay algo que Dani Martín siempre ha demostrado, y es estar libre de prejuicios y tener una personalidad arrolladora. Este sábado el de Portales acudió de invitado al concierto que celebraba la banda femenina en el Teatro Circo Price, invitación que aprovechó para saltar al escenario con sus mejores galas: un vestido blanco de encaje, unos calcetines altos, unas zapatillas y bien de sombra negra en los ojos.

 

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Un fan absoluto de Ginebras

 

Hace unos meses hablaba de Ginebras en sus redes como uno de sus nuevos grupos favoritos y sembraba así el deseo de muchos de una colaboración conjunta. Este fin de semana este deseo se ha visto calmado gracias a la sorprendente aparición del madrileño en el concierto de la banda formada por Magüi, Juls, Raquel y Sandra.

«Ayer volví 20 años atrás. Desde que llegué a los camerinos, Ginebras son ellas. No hay nadie más que pueda hacer lo que ellas hacen y, cuando eso sucede, es mágico«, compartía el artista en sus redes.

Además, Dani Martín equiparó su etapa en El Canto con lo que ellas están viviendo. «Yo tuve una banda que ahora es vuestra, ellas tienen la suerte de seguir teniéndola. Os admiro y os envidio«, confesaba el cantante, que recibía el cariño de estas multiplicado:

«Luego está lo de esta maravilla de persona. Es la primera vez que no queríamos estar solas en el camerino porque él nos tranquilizaba. Y cuando a las personas les une la música todo lo demás importa una mierda. Ni la fama, ni los años, ni los estereotipos. Revés de mano con el dedo medio extendido. Gracias Dani».

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