Ibai Llanos es un fenómeno de masas que alcanza una audiencia de lo más amplia. Con sus emisiones en directo en plataformas como Twitch, consigue llegar a mucha gente que le admira por su manera de comunicar.
En los últimos días, su papel como comunicador ha sido bastante criticado por profesionales del sector. Sin embargo, su perfil es uno de los más seguidos. A pesar de que sus emisiones giran en torno a fútbol, videojuegos y la vida en la red, también sabe meter algunos detalles de su vida privada para que sus seguidores le sientan más cercanos.
El ‘streamer’ confesó que vivía con otros jóvenes que también hacen directos. Y en la última emisión ha contado el detalle tan bonito que ha tenido con una de sus empleadas domésticas. Antes de empezar a narrar la historia ha aclarado que no lo hace para quedar bien. “Lo cuento aquí en Twitch que estamos en familia”.
Entonces, ha empezado a narrar la historia de todo lo que han vivido en ese día. “Trabajamos con tres chicas en casa que son increíbles, son las personas que más nos ayudan en casa. Parte del equipo de limpieza y parte de cocina”. Aquí, antes de que las críticas pudiesen acecharle, ha aclarado que tienen a alguien para ayudarlos con la cocina y la limpieza porque sino podrían acabar “matándose” entre ellos.
Ibai Llanos sobre ayudar a los demás: “De eso se trata la vida”
“Nosotros siempre intentamos tratarles lo mejor posible, no solo a nivel de condiciones sino también de trato”. Entonces ha sido ahí cuando ha desvelado el gran gesto de generosidad que ha tenido con su empleada.
“Ella tenía un problema para pagar el piso y yo le pagué todo el alquiler de enero a diciembre, porque tenían un problema al ser de Honduras. Además, llevaba sin ver a sus hijos tres años. Al parecer es muy caro salir de Latinoamérica”.
Entonces, la continuación de la narración ha sido lo que ha conmovido a todo su público, “Hoy han venido los hijos de Karen. Nunca han podido venir desde Honduras y se lo hemos podido pagar nosotros y creo que es un gran gesto. Son personas super agradecidas y creo que la vida se trata de eso: si tú puedes, intentar ayudar. No puedes echar una mano a todo el mundo, pero yo que trabajo con un grupo pequeño de personas, intento que estén lo mejor posible”.
Este relato ha demostrado la generosidad y el corazón de Ibai al ayudar a una familia a superar una crisis económica y, sobre todo, a hacer feliz a una familia. Una lección de vida que, gracias a su visibilidad, ha podido llegar a muchos jóvenes.
