Di adiós a las tortillas de patatas, los filetes empanados y hasta el vino fresco bajo la sombrilla. Las altas temperaturas y la creciente subida de precios de estos meses ha llevado a todos los ciudadanos a llevar los alimentos imprescindibles a la playa, es decir, agua para refrescarse porque vuelven a su casa u hotel para comer o un buen bocata.
Un gesto muy repetido en estos meses de verano que este año se triplica, pero que según comentan los expertos puede resultar perjudicial para tu salud. Es cierto que durante los días de playa estamos muy acostumbrados a disfrutar de platos típicos de nuestra cocina, pero lejos de saciarte e hidratarte provocan el efecto contrario.
Si quieres seguir disfrutando de tus vacaciones tranquilo evita ingerir alimentos que lleven huevo o leche porque puede producirte una intoxicación alimentaria, como la salmonelosis.
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Alimentos prohibidos en un día de playa
La tortilla de patatas nos salva la comida con la familia y los filetes de pollo empanados nos quitan más de un quebradero de cabeza con los más pequeños. Lo mismo sucede con la ensaladilla rusa, que puede cortarse a causa de la mayonesa. Da igual que bajes tu neverita porque conservar los alimentos a más de 30º C como temperatura abierta es una tarea complicada, pese a que cumplan su función refrigerante.
Si ya hablamos de las bebidas, tienes que tachar también de la lista el vino blanco. Una copita o un vaso fresquito puede darte la vida por el simple placer de tomarlo, pero la realidad es que hay estudios que alertan que su consumo puede derivar en un cáncer de piel, tal y como recoge el programa Ya es mediodía en su sección de actualidad informativa.
Entonces pensarás… ¿Qué puedo llevarme? La respuesta es sencilla: verduras, aunque puede que no te vaya a gustar, ya que las vacaciones siempre las asociábamos con disfrutar y no controlar en exceso lo que comemos. Las verduras se convertirán en tu mejor aliado para tus días de playa.
Alimentos como la lechuga, el apio, el pepino y el tomate son los mejores ingredientes para combatir el calor y, sobre todo, tu temperatura corporal. Aunque si lo prefieres también puedes optar por un buen gazpacho. Y si tu economía se lo puede permitir puedes tratar de combinarlo con productos frescos como los berberechos, los mejillones o el atún. Y de postre olvídate de una bebida caliente o alcohólica, ya que la primera provoca que sudes más y la segunda deshidrata. Así que, nada mejor que un poco de fruta como la sandía, la piña o el melón para disfrutar de tu día de playa sin riesgos de intoxicación.
