Esta claro que perder peso o mantenernos en un peso saludable no es solo cosa de los meses de verano o los inmediatamente anteriores a ellos. Se trata de una forma de vida, algo que debemos cuidar durante todo el año. Y es que algo en lo que coinciden la mayoría de los expertos es que un buen plan de alimentación y ejercicio constante en pequeñas dosis, son las claves de que nos mantengamos en forma. Mantente en forma y adelgaza prestando atención a estas tres cosas
Hoy hablamos de algunos otros factores, además del ejercicio en los que debes fijarte a la hora de conseguir o fijar resultados en lo que a estar en forma se refiere.
El primer factor importante es el sueño, si no cuidas tu descanso no conseguirás tan rápidamente tus objetivos de pérdida de peso, es más, conseguirlo te costará bastante más. Hay estudios que demuestran que si duermes menos de cinco horas tus niveles de grelina, la hormona regula el hambre, aumentarán y con ellos la sensación de hambre. Al mismo tiempo producirás menos leptina la hormona supresora de las ganas de comer.
¿Qué es la grelina?
La hormona grelina es la culpable de que a pesar de estar a dieta no adelgaces. Se produce en el estómago e influye mucho en nuestro apetito y también en nuestro peso ya que es la responsable de que aumente la sensación de hambre y las ganas de comer. No hay un ‘botón mágico’ para encenderla o apagarla, pero si podemos hacer algunas cosas en este sentido.
Pero el sueño no es el único factor que puede afectar a nuestra pérdida de peso. Comer y comer bien es otra de las claves, tal y como explican desde la revista Hola, «los especialistas del Club Metropolitan tienen un consejo: Intenta no consumir alimentos y platos copiosos y muy grandes, aunque estos sean saludables. Puedes intentar moderar la ingesta de carne roja y sustituirla por pescado al menos tres veces por semana. Además, minimiza el consumo de grasas malas y prioriza aquellas más saludables, como el aceite de oliva o los aguacates».
Es muy importante también mantenernos hidratados ya que la función principal del agua en el cuerpo es la de mantenerlo hidratado pero también regula nuestra temperatura corporal y ayuda a funcionar a los riñones, transporta nutrientes y oxígeno en la sangre y permite que se eliminen toxinas. Cuando no eliminamos esas toxinas solemos tener retención de líquidos y eso hace que pesemos más y nos sintamos hinchados. La recomendación de los expertos es de unos dos litros al día en forma de agua o infusiones.
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