Pablo Urdangarin junto a su padre, Iñaki Urdangarin.

Pablo Urdangarin, portavoz involuntario de la familia, tras la dura decisión de la infanta Cristina

El segundo de los hijos de la pareja ha compartido con la prensa su punto de vista sobre la última decisión de su madre, la infanta Cristina.

Guss González

Pablo Urdangarin, segundo hijo de la ya ex pareja formada por la infanta Cristina e Iñaki Urgandarin, es todo un jovencito que ya se maneja con soltura y aplomo.

Pablo, que declaraba a la prensa su postura tras el estallido de la noticia de la separación de sus padres, se ha mostrado siempre como un chico muy maduro y sensato.

«Yo prefiero no decir nada porque es un tema familiar… Ya está… Son cosas que pasan. Luego hablaremos nosotros y ya está…» se pronunciaba el joven al trascender la noticia sobre la separación de sus padres.


Ahora la infanta Cristina, y tras el comunicado oficial que lanzaba de manera conjunta a su ex en el que informaban del fin de su relación, se ha expresado de manera muy tajante.

Tal y cómo publicaba la revista «Lecturas», y según la periodista Pilar Eyre, la infanta no tiene ninguna intención de acercar posturas y de buscar una hipotética reconciliación con el que fuera su marido.

 

Pablo Urdangarin habla con la prensa

 

La decisión de sus padres afecta, como es lógico, a toda la familia. Sin embargo, Pablo Urdangarin se muestra amable con los medios, haciendo las veces de portavoz familiar sobre este asunto.

El joven se ha relacionado con la prensa con absoluta naturalidad, respondiendo a las preguntas de los periodista. Su amabilidad ha terminado generando una cercanía con los medios, que apuestan por él a la hora de conseguir más información sobre la ruptura de sus padres.

Infanta Cristina

Ante las preguntas de los periodista, Pablo se ha mostrado muy amable y respetuoso, indicando en todo momento que no hay intenciones por parte de la familia de conceder ningún tipo de declaración sobre la posibilidad o no de reconciliación.

Las dudas sobrevuelan de acuerdo a la interpretación literal del comunicado de los ex duques de Palma, en el que podíamos leer que había decidido de mutuo acuerdo «interrumpir nuestra relación matrimonial». Una forma un tanto fría que algunos han interpretado como una posible pausa previa a una reconciliación.