Shakira y Gerard Piqué se conocieron durante el Mundial que ganó España en 2010. Llevan juntos doce años, en los cuales han formado una familia junto a sus dos hijos, Milan y Sasha, y hacen su vida en la ciudad de Barcelona. Sin embargo, no ha habido planes de boda en todos estos años.
El motivo lo ha revelado la cantante colombiana en una entrevista en el podcast Planet Weird, en la que cuenta por qué no quiere casarse con el padre de sus hijos. También ha hablado de los motivos por los que discute con el defensa del FC Barcelona.
Como cualquier pareja, Shakira y Piqué discuten, pero también tienen tiempo para reconocer los logros de la pareja. Por ejemplo, el último ha sido llenarle de elogios por cumplir 600 partidos con su club.
«La idea del matrimonio me espanta. No quiero que me deje de ver como su chica. Es como aquella fruta prohibida, prefiero mantenerlo atento y que piense que todo es posible dependiendo su comportamiento», comentaba en la entrevista.
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Además, confesó que es feliz viviendo en Barcelona, pero que le gustaría mudarse a Miami. Todo será cuestión de tiempo y de valorar las posibilidades. Sobre todo, ver si la vida de sus hijos fuera a cambiar demasiado.
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En la entrevista también habló del tiempo que Gerard tiene que esperar a la artista, pues la puntualidad no es su punto fuerte.
«Mi pobre marido, mi novio, mi papá, como quieras llamarlo, tiene que esperarme tanto tiempo», comentó. «Está cansado de esperar. Porque la hora colombiana no es la misma que la catalana, la española».
Además, Shakira contó que él está acostumbrado a un horario estricto debido a la precisión que existe en un equipo de fútbol en cuanto a los tiempos. «Su mente está estructurada así y la mía… me he vuelto mucho más puntual desde que lo conocí. Pero las veces que realmente nos peleamos es porque yo llego tarde y él me espera despierto», revelaba.
Los tiempos no solo son importantes para la pareja, sino que hay veces que por sus apretadas agendas pueden llegar a estar un mes sin ver a sus hijos. Entre partidos y giras, «es duro, pero hacemos muchas llamadas por Facetime, así que estamos en constante comunicación, y eso ayuda», terminaba explicando la cantante. Conciliar la vida familiar y la profesional es un reto al que toda pareja tiene que hacer frente, no solo los matrimonios.
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