¿Por qué es arriesgado romantizar el amor?

Los motivos por lo que no debes hacerlo

Álvaro Díaz

 

El rollo del amor romántico viene de Occidente y sostiene que el amor tiene que ser eterno, exclusivo, incondicional y sacrificado. Aquí te lanzo algunas razones por las que deberíamos dejar de idealizar el amor romántico.

La «media naranja»

Esta idea nos hace creer que para ser felices, necesitamos una pareja. ¡Error! Ya somos seres completos con o sin compañía. Una relación debería ser un extra, no una necesidad.

«El amor todo lo puede»

Nos han metido en la cabeza que el amor es la solución mágica para todos los problemas de pareja. Pero ojo, hay problemas que merecen más atención que sacrificar tu propia integridad y felicidad. Si la relación está más cargada de problemas que cosas positivas, es hora de mandarla a paseo.

 

«Amor para siempre»

¿Cuántos han soltado el «te amaré siempre» y luego qué, ¿fue en serio? Lo ideal es amar mientras dure y aprender a soltar cuando sea necesario. Las personas no son posesiones eternas.

«Tengo celos porque te amo»

Esto va de la mano con lo anterior. Nadie te pertenece, y el respeto debe ser la regla número uno. Los celos son veneno y solo demuestran posesión.

 

«Te quiero más que a nada, más que a mi vida»

No deberías poner a nadie por encima de ti mismo. ¿Qué pasa si eso te juega en contra? Establecer límites es crucial para tu bienestar. No justifiques comportamientos tóxicos pensando que con amor todo se arreglará.

 

Idealizar el amor es peligroso, porque puede generar dependencia, ansiedad y estrés. ¿Es eso lo que realmente quieres?