La cuenta atrás para la Navidad llega este año marcada por un dato llamativo: será la Navidad más cara de la historia. Los españoles destinarán 300 euros en sus compras, según la Asociación Española de Consumidores. A las tradicionales compras de regalos se suman cenas, lotería, ocio y preparativos que elevan las facturas a niveles inéditos. No sorprende, por tanto, que uno de cada dos españoles haya empezado a ajustar su consumo semanas antes de diciembre.
Estudios de años anteriores reflejan claramente este aumento en la tendencia. El informe Hábitos de Compra en España-Navidades 2024, elaborado por Elogia, ya señalaba un incremento del gasto en regalos: si en 2023 la media rondaba los 218 euros, según datos recogidos por Business Insider, en 2024 ascendía a 243 euros. Todo apunta a que la campaña de este año seguirá en la misma línea ascendente.
El aumento de precios no afecta a todos por igual a todos los sectores, pero sí hay tendencias claras comprobadas en una encuesta realizada por la Asociación Española de Consumidores. Los regalos y juguetes continúan siendo una de las categorías con mayor peso en el presupuesto familiar.
También lo hacen el ocio, las celebraciones, la lotería y las cenas, que forman parte central de la agenda emocional y social de estas fechas. Incluso los elementos más pequeños, como decoración o donativos, suman en la factura final.
El gasto medio de una persona esta Navidad será de 1.300,13 euros en España. En cuanto a las provincias españolas que más gastarán en estas Navidades, la Asociación destaca a Madrid, con un gasto medio por consumidor de 1.667 euros, seguida de Zaragoza (1.663 euros) y Bizkaia (1.628 euros).
En el otro lado se encuentra Almería, con un gasto medio de 1128 euros, seguida por Las Palmas con un gasto total medio de 1.137 euros y de Badajoz, Lugo y Pontevedra, con una media total de 1.143 euros por consumidor.
Esta presión económica afecta especialmente a hogares con parejas jóvenes, familias con ingresos ajustados y personas que deben afrontar varios eventos sociales en un período corto de tiempo. Para muchos, la sensación de que ‘todo cuesta más’ se convierte en un factor de estrés añadido en un mes donde, tradicionalmente, el deseo es disfrutar.
Ante este contexto, la segunda mano se consolida como una de las soluciones más efectivas y normalizadas. Un estudio realizado por Milanuncios junto a Appinio revela que el 55% de los españoles recurrirá este año al mercado de segunda mano para parte de sus compras navideñas. La cifra no solo confirma un cambio de hábitos, sino un salto cultural: ya no se percibe como una alternativa de necesidad, sino como una opción inteligente.
Las generaciones que más se decantan por ella son la Generación Z y la Generación X, que valoran tanto el ahorro como el acceso a productos únicos o descatalogados. Entre las categorías más demandadas destacan los videojuegos, la tecnología, la moda y el entretenimiento, una combinación que demuestra que la segunda mano no solo cubre necesidades básicas, sino que también ofrece regalos muy buscados.
Además del aspecto económico, muchos consumidores valoran su componente sostenible. Comprar artículos reutilizados permite reducir residuos, dar una segunda vida a objetos en perfecto estado y fomentar un consumo más consciente. Para Milanuncios, esta tendencia refleja «una forma de consumo más madura y responsable, especialmente en épocas de gasto elevado».
Aunque esta Navidad sea más exigente para el bolsillo, no tiene por qué serlo para la ilusión. Ajustar el presupuesto, comparar precios, planificar con antelación y apoyarse en alternativas como la segunda mano puede marcar la diferencia. Al final, lo que queda, y lo que verdaderamente importa, no es la factura, sino los momentos que compartimos.
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