La Dirección General de Tráfico, conocida comúnmente por sus siglas DGT, continúa su hazaña para reducir al máximo los accidentes que se provocan cada día en las carreteras de nuestro país por el exceso de velocidad de los vehículos que transitan por las mismas. Es por eso que ya estudian implantar en toda España un nuevo radar que ya se puede observar en vías de Cataluña o de Francia.
Y es que sobrepasar los límites establecidos para cada carretera sigue siendo uno de los principales motivos de muerte de conductores y acompañantes, y esto es algo que las autoridades pretenden revertir lo antes posible.
En las carreteras francesas ya podemos encontrar más de 100 carro-radar o radar de remolque, mientras que en Cataluña hay repartidos 4 de estos nuevos dispositivos tras su implantación por parte del Servei Catalá de Tránsit, el organismo que en esta comunidad autónoma tiene las competencias de la DGT y que ha asegurado que se ampliarán a 10 carro-radares antes de que acabe el año. Ahora se expandirán a la totalidad de nuestro país tal y como ha explicado el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, junto a Pere Navarro, director de la DGT, quien «en breve va a ir a hacer una comprobación en persona a Francia con el fin de poder sacar una idea todavía más clara».
Como su propio nombre nos apunta se trata de un radar sobre ruedas que se utiliza para extremar la vigilancia en «tramos de riesgo como las zonas de obras», aunque no por ello quiere decir que no pueda ponerse en funcionamiento en cualquier otra carretera con una afluencia de tráfico normal. «Estos radares móviles se dice que son sobre ruedas porque están sobre unos dispositivos con ruedas y que pueden ser fácilmente desplazables a los tramos o lugares donde se necesite o se entienda preciso y poder ser utilizados», afirma el ministro del Interior.
El plan inicial sería colocarlos en tramos de aproximadamente 3 kilómetros que estén sufriendo alteraciones puntuales como obras o cambios en el pavimento, es decir, aquellos que están señalizados con señales amarillas cuyas advertencias predominan sobre las señales verticales habituales.
Cataluña, que ha sido la primera comunidad autónoma de España en implantarlos, en apenas 3 días registró 9.980 detecciones por exceso de velocidad gracias a estos carro-radares, y sus primeros registros confirman que entre el 17 y el 23% de los vehículos que pasan por delante de ellos circulan superando los límites establecidos.
Un dato que vuelve a reflejar la cantidad de infracciones que se cometen cada día poniendo en riesgo la vida de conductores y acompañantes que circulan por las carreteras de nuestro país.
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