Sin embargo, eso no le impediría saludarles a través de la sirena de su coche patrulla. Los «te quiero» y gritos de los pequeños desde su balcón hacen saltar las lágrimas.
Alberto es Guardia Civil de Gandía y trabaja a pie de calle. No ve a sus niños desde que empezó todo. Decidió no verlos hasta que pasara todo y así fue la reacción de sus pequeños cuando pasó el coche de su papá por la calle donde viven durante el confinamiento. #LiarlaPardo78 pic.twitter.com/AbQriXpQqj
— MASPITV (@TVMASPI) April 5, 2020
Por otro lado, Lavapiés se sumaba en un acto precioso para una vecina que cumplía años. La pidieron asomarse a la ventana para acabar escuchando a todos, casi sin excepción, cantando el cumpleaños feliz.