La primera consulta nos la envía Amelia, «A mi hijo le toca en un dos semanas la vacuna rotarix, la que se come, pero es que el niño, todo lo nuevo lo vomita. Si lo hace, ¿hay que comprarle otra?».
Las vacunas por vía oral tienen sus ventajas e inconvenientes. Como siempre, sería necesario valorar el caso concreto, cuánto tiempo ha pasado desde que se ingirió hasta el momento del vómito.
La segunda consulta es de María: «Mi hijo lleva dos meses tosiendo y aunque está tomando un jarabe, no le hace efecto. Un familiar me ha dicho que esto sucede porque los jarabes de para la tos no funcionan en los niños. ¿Es cierto?»
Efectivamente, los estudios existentes no concluyen que los jarabes para la tos sean eficaces en los niños. Lo que si hay que tener en cuenta son los efectos secundarios que en algunos casos pueden llegar a ser graves. Por eso nunca se recomienda administrar jarabes antitusivos a los niños.
Para los resfriados y la tos irritativa lo mejor es tratar los síntomas: poner el niño a dormir algo incorporado, mantenerlo bien hidratado, o los lavados nasales si hay mucha mucosidad.
Y un remedio casero muy eficaz de toda la vida: la leche templada con miel.
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