Fuera pereza para limpiar los cristales: trucos para que queden relucientes sin esfuerzo

Ana Más

Si no encuentras el momento para limpiar los cristales porque te cuesta dejarlos bien, te contamos algunos trucos para que tus mesas, espejos y ventanas queden divinos, sin restregones ni brillos. ¡Será coser y cantar!

Lo primero es importante proteger la zona que vayamos a limpiar con sábanas o toallas viejas para no dejar todo chorreando de agua.

Para secar utiliza papel de periódico hecho una bola o un paño de microfibra, que no suelta pelusas. Hazlo de arriba abajo para no manchar la zona que ya has limpiado.


Además necesitarás un barreño pequeñito, limpiacristales,  vinagre de limpieza, jabón neutro, un estropajo suavecito y dos bayetas (una para el agua sobrante y otra para secar).

Limpieza de cristales, productos necesarios

Puedes usar el limpiacristales de toda la vida pero hay otros productos con los que conseguirás también muy buenos resultados.

Por ejemplo el amoniaco, muy eficaz para desengrasar y si los cristales tienen más suciedad de la habitual, debes aplicarlo diluido en un cubo de agua con la que limpiarás los cristales. Seca luego haciendo círculos.

Si usas vinagre blanco o de limpieza obtendrás unos resultados estupendos. El vinagre tiene propiedades antisépticas, antifúngicas y antibacterianas y por ello elimina bacterias, gérmenes y moho de los cristales.

Además de servir como repelente de insectos, hormigas, moscas y mosquitos por su fuerte olor.

Mezcla agua y vinagre a partes iguales en una botella y vaporízalo. Luego seca con una bayeta de microfibra siempre en la misma dirección para que no queden rastros, y cuando termines pasa otra bayeta limpia por toda la superficie para que no se formen manchas.

Otra buena opción es usar alcohol mezclado con agua y secar con un paño. Es muy eficaz para la limpieza de espejos. Bastará con que pases esta mezcla previamente a la limpieza normal, verás cómo consigues un brillo especial.

Y para manchas muy incrustadas puedes usar un quitamanchas, el que usas para la ropa te servirá. Para ello debes echar unas gotas en una botella con atomizador con agua, frota un poco con esta mezcla y luego pasa de nuevo la esponja para eliminar los restos, por último pasa un paño seco.

Algunos truquillos

Los expertos nos recomiendan mejor limpiar los cristales interiores en días nublados porque así los rayos solares no impiden que veamos bien las posibles manchas. Corres el riesgo de que llueva si, pero el resultado será bastante mejor. Otra opción es limpiarlos a primera hora de la mañana o a última de la tarde cuando el sol no está fuerte.

Debes limpiarlos regularmente ya que están en contacto continuo con el exterior.

 

 

 

 

 

MÁS SOBRE: