Isidro Montalvo negocia la compra de un frigorífico mientras finge trabajar en una tienda erótica

Rodrigo Díaz

La nueva bromita de Isidro Montalvo va a conseguir que nos partamos de risa a la par que deja totalmente blanco a este pobre atrevido que vendía un frigorífico.


 

 

 

Mientras pretendía conocer detalles sobre la potencia, bandejas y funcionamiento de la nevera, el humorista tenía que ponerse frente al megáfono y anunciar todas las novedades de su tienda erótica.

El pobre hombre no sabía ni qué contestar cada vez que Isidro mencionaba lo atractivas que eran Jennifer «Stonei«, Carla «Keifreis« o los australianos Héctor y Manson. 

Aún no sabemos si ha habido acuerdo con el frigorífico. De momento, el vendedor puede darse con un canto en los dientes porque ya tiene invitación para la famosa «sex shop».