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Una ex colaboradora de Sálvame se desquita con el programa: «Pégale un empujón y que se caiga por las escaleras»

Se trata de Pepa Sanz que trabajó como entrenadora de algunos famosos

Ana Más

Durante  sus trece años de emisión Sálvame ha contado con diferentes secciones, entre ellas una en la que algunos famosos se proponían adelgazar en firme. Algo para lo que contaron con la ayuda y el seguimiento en directo de una entrenadora llamada Pepa Sanz.

Entre las famosas que participaban en la sección en la que intentaban quitarse esos kilitos de más,  Anabel Pantoja fue de las más mediáticas y a la que la entrenadora le hizo especialmente la vida imposible.

Pepa se dio a conocer como concursante de ‘Ven a cenar conmigo’, pero poco a poco consiguió tener su propia sección en Sálvame, dónde hizo muy «buenas migas» con Jorge Javier al que ahora sin embargo dice echar de menos en un momento complicado de su vida.


Durante algún tiempo tuvo su propia sección en Sálvame

 

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Y es que Pepa Sanz está recuperándose de una operación de pecho a causa de una prótesis en mal estado, «Entrenando se me reventó la prótesis, se me había encapsulado y el cirujano cuando abrió se encontró que estaba todo esparcido, estuvieron cuatro horas de operación», explicaba.

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Una intervención de la que estaban al tanto en Sálvame ya que precisamente habían vuelto a contactar con ella para proponerle una nueva sección. Más razón para que la entrenadora haya echado en falta el apoyo de Jorge Javier y el resto de compañeros, tal y como cuenta en una entrevista para Bluper.

Además habla «sin pelos en la lengua», de lo que le pagaban en el programa e incluso explica que en ocasiones le pedían que hiciera cosas no «demasiado ortodoxas», todo con la intención de llevar al limite a Anabel. Pepa se refiere concretamente a un día en el que le pidieron que empujara literalmente a la colaboradora por las escaleras, «Querían que hiciera llorar a Anabel. No se me olvidará nunca una vez que ella tenía que montar en bicicleta y el guionista me dijo «pégale un empujón y que se caiga por las escaleras». Mi trabajo era hacerla llorar y que sufriera»», explica.

 

 

 

 

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