Junto a su pequeño Máximo y el resto de la familia, la colaboradora de El Hormiguero encara este final de año con más ilusión que nunca, cuidando de sus chicos y trabajando duro en su estado de forma, que sigue siendo más que admirable.
Pero lo más curioso de este santo en tiempos de pandemia ha estado claramente en las celebraciones. La primera, a golpes, boxeando duro en el gimnasio.
La segunda… Ya ha sido de noche y en la mejor compañía posible.
No obstante, la experiencia es un grado y después de cuatro hijos todo se enfoca desde otra perspectiva, ¿no es así, Pilar?
La comunicadora madrileña ha terminado el puente con su cuarto retoño, Máximo Adriano, «rezando para que se duerma» según nos contaba en las historias de Instagram.
¡Esperemos que hubiese final feliz! Dulces sueños.