Lucía Villalón da buenas noticias sobre Diego, su niño: «Está perfecto, come increíble»

El pequeño ha pasado por una gastrosquisis

Ana Más

Hace unos días la periodista deportiva Lucía Villalón contaba en la revista Hola que se había casado por lo civil con el futbolista de la U.D Almería, Gonzalo Melero. Ahora ambos vuelven a celebrar en este caso algo tan importante como que su hijo Diego, con el que han pasado momentos de mucha angustia por razones de salud, está estupendamente. «Está perfecto, come increíble, su intestino funciona perfectamente y su cicatriz es preciosa», decía emocionada.

La pesadilla comenzaba hace más de un año, cuando el pequeño aún no había nacido, y les comunicaban a sus padres que «era especial», como le gusta decir a la comunicadora. Un año de lucha, incertidumbre y preocupaciones que afortunadamente ahora dejan atrás. Algo que Lucía ha querido compartir con sus seguidores en redes.

«¡Me flipa compartir con vosotros las buenas noticias!», comenzaba escribiendo y seguía: «Esta semana tocaba médicos y ha sido increíble. Hemos ido a La Paz a ver a la ginecóloga, la Doctora de la Calle, y al cirujano pediátrico, el Doctor Encinas, y no podemos estar mejor».


Lucía Villalón, feliz al salir de la revisión de Diego


Unas palabras que escribía junto a un vídeo en el que se ve sonriente al pequeño Diego, la noticia que ha llenado de alegría a amigos y seguidores de Villalón, que además ha agradecido todos los mensajes de cariño que han recibido y reciben.

En el vídeo la doctora De la Calle explica que el pequeño está estupendo tras pasar por una gastrosquisis, mientras Lucía reconocía nerviosa que solo ir al hospital le «remueve todo», por lo mal que lo ha pasado allí desde el embarazo. Luego ya en la puerta de La Paz, la periodista con Diego en brazos comunicaba que el cirujano había dicho que estaba todo fenomenal y besaba sonriente a su pequeño.

La gastrosquisis es una malformación de la pared abdominal que desarrolla el bebé estando en el vientre de la madre. Según los expertos, se desconocen las causas que lo producen, aunque parece que tiene un fuerte componente hereditario. El tratamiento pasa por cirugía nada más nacer. Afortunadamente el pequeño Diego lo ha superado y está precioso y sano a sus ocho meses.

MÁS SOBRE: