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El curioso método de un conocido psiquiatra para hacer felices a sus pacientes

Netflix ha realizado un documental sobre él

Ana Más

Aunque lo normal es que los psicólogos y psiquiatras digan a sus pacientes que no quieren entrometerse en sus vidas, el psiquiatra del que te hablamos hoy les dice a estos exactamente lo contrario, que hagan exactamente lo que él les dice. «Inmediatamente ven un progreso, y eso les hace felices», esto es lo que explica con gran seguridad en sí mismo Stutz, en el documental de Netflix que lleva su nombre y donde el actor Jonah Hill, paciente suyo, le entrevista y habla sobre su vida y enseñanzas.

Stutz es unos de los psiquiatras más conocidos de Hollywood, al que han recurrido un montón de artistas, productores y ejecutivos y lo primero que propone a sus pacientes es trabajar lo que llama ‘la fuerza vital’, una jerarquía de necesidades humanas para la que se inspira en la pirámide de Maslow. En la base estaría el cuidado del cuerpo que debemos priorizar cuando nos sentimos mal. Lo primero que recomienda a sus pacientes es alimentarse bien, dormir, hacer ejercicio y no pensar en nada más.

La siguiente fase sería el contacto social, algo que considera un asidero para llevarte de «vuelta a la vida», ya que cuando nos deprimimos nos separamos de la gente y de nuestra propia vida. Por eso propone a sus pacientes que tomen la iniciativa de tomar un café con alguien aunque no les apetezca.


Philip Stutz, uno de los psiquiatras de famosos y artistas

 

Y ya por último, cuando el paciente se siente bien físicamente y ha reactivado su vida social, le recomienda centrarse en uno mismo y conectar con su inconsciente, para lo que recomienda escribir. Además, señala tres aspectos de la realidad que debemos aceptar lo antes posible para avanzar: el dolor, la incertidumbre y el trabajo constante.

El experto explica que a pesar de aceptar estos tres aspectos y trabajar nuestra fuerza vital, todos tenemos que luchar con algo que él llama la «Parte X», un término con el que se refiere a lo peor de nosotros mismos, a aquello que no somos capaces de hacer y que nos suele dar miedo visualizar. Stutz propone vivir con ello, ya que siempre volverá. Un subproducto de esa «parte x» es lo que él llama el laberinto, que es aquello que te mantiene atrapado en el pasado lleno de culpa y remordimientos.

Además, propone la aceptación radical. Esto es sacar lo positivo de todo y expresa la clave de la felicidad con la siguiente frase: «No seas memo, haz algo por mucho miedo que tengas».

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