El primer embarazo puede generas muchas dudas y temores en la futura madre y cada caso es diferente. Son muchas las mujeres que se preguntan qué deben hacer y qué no durante la gestación o qué alimentos son seguros y cuáles no durante este proceso.
Durante todo el tiempo que dura, el cuerpo de la embarazada necesita más niveles de energía, minerales, proteínas y vitaminas. Por eso, algunas de las principales dudas que surgen en la dieta materna son, por ejemplo, si es necesario tomar vitaminas durante el embarazo.
Para empezar, es importante destacar que en ocasiones la dieta, por mucho que se cumpla, no es suficiente y la situación de la madre requiere de suplementos. No debemos olvidar que el exceso o escasez de determinados nutrientes son esenciales para el desarrollo y crecimiento del feto.
Si bien es cierto que desde la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) recomiendan hacer entre 4 y 5 comidas al día, aumentar el consumo de frutas y hortalizas, comer pescado entre 3 y 4 veces a la semana (sobre todo pescado azul) y beber al menos 2 litros de agua al día, no especifica en sus recomendaciones el consumo extra de vitaminas.
De hecho, en su ‘Guía de alimentación para embarazadas’ de la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad (SEEDO) advierten del peligro
de “medicalizar” los embarazos, resaltando el riesgo de la »polimedicación con suplementos de minerales y vitaminas».
Entonces, ¿qué dieta hay que seguir durante el embarazo? La respuesta es sencilla: una dieta equilibrada. Desde el SEEDO indican que »una dieta equilibrada aporta la suficiente cantidad de vitaminas y minerales necesarios para el organismo, lo que facilita y previene futuras complicaciones durante el embarazo».
Llevando una alimentación sana y equilibrada, respetando los productos prohibidos en el embarazo, se deberían cumplir con los niveles vitamínicos recomendados.
Irene Lezcano, nutricionista de Nutritienda, explica el motivo de estos suplementos en ABC: «Los folatos son nutrientes esenciales que solo pueden incorporarse ingiriéndolos, es decir, el cuerpo humano no es capaz de sintetizarlos».
Cabe destacar que aunque la principal fuente de absorción de la vitamina D es el sol, las embarazas no pueden recibir un exceso de rayos UVA, por lo que a veces se requiere de un complemento.
Puedes encontrar esta vitamina en pescados azules como las anchoas, el atún, el arenque, sardinas, caballa y salmón, yemas de huevo, lácteos y si uno quiere darse un lujo, el caviar y las angulas.
En la gestación, los niveles de vitamina A de la madre no se ven muy alterados, pero un déficit de esta sustancia podría provocar un parto prematuro, retraso del crecimiento intrauterino y bajo peso al nacer.
La puedes encontrar en huevos, leche, mantequilla, vegetales y frutas con colores vivos como mango, melocotón, albaricoque, calabaza, zanahoria, tomate y pimiento. También en espinacas, acelgas y canónigos.
Ambas son antioxidantes y se ha asociado la fatal de vitamina E con el retraso de crecimiento intrauterino (CIR) y la rotura prematura de membranas (RPM), pero desde Sanidad advierten de que »no hay suficiente información disponible para evaluar los posibles beneficios o efectos perjudiciales de los suplementos de vitamina E durante el embarazo. No hay evidencia de que disminuya la incidencia de preeclampsia, bajo peso al nacer o prematuridad».
En cuanto a la vitamina C, en la gestación se necesitan hasta 85 mg/día y su carencia provoca escorbuto, una enfermedad caracterizada por el daño en el tejido conectivo y hemorragia capilar, con sangrado gingival, cicatrización deficiente.
Además del ya mencionado ácido fólico, las vitaminas B son: B1 (tiamina), B2 (riboflavina), B3 (niacina), B5 (ácido pantoténico), B6, B7 (biotina), B12. Como ocurre con otras sustancias, la necesidad de ella aumenta en las embarazadas y en periodo de lactancia.
«Los suplementos de vitamina B6 se usan a veces para controlar las náuseas, siempre y cuando sea pautado por un especialista. Es una vitamina decisiva para el desarrollo cerebral del futuro bebé», apunta Lezcano.
Puedes encontrar estas vitaminas en cereales integrales, quesos, pollo, pavo, sardinas, lenguado, atún, salmón, trucha, lentejas, nueces, plátano, aguacate, maíz, arroz, pistachos y patatas.
MÁS SOBRE:
© Sociedad Española de Radio Difusión, S.L.U.
© Sociedad Española de Radiodifusión realiza una reserva expresa de las reproducciones y usos de las obras y otras prestaciones accesibles desde este sitio web a medios de lectura mecánica u otros medios que resulten adecuados a tal fin de conformidad con el artículo 67.3 del Real Decreto-ley 24/2021, de 2 de noviembre.