Cada vez las temperaturas bajan más, y eso el cuerpo lo nota. Pasamos de querer tomar un refresco bien frío a tener como mayor aliada una bebida caliente que nos haga sentir mejor, como el café, un alimento que ahora los nutricionistas definen como imprescindible, sobre todo en la estación de otoño.
En un artículo para La Razón, la nutricionista Paloma Quintana ha puesto en valor la ingesta de esta bebida durante el otoño, destacando los siguientes beneficios:
Aumento de la energía: para la experta, esto es fundamental, ya que «durante la transición de una estación a otra debe haber una adaptación. Esta viene dada por el cambio de horas de luz, y con la disminución de estas comenzamos a notar menos vitalidad».
Muy rico en antioxidantes: según Quintana, el café contiene antioxidantes que benefician nuestra salud cardiovascular, lo que ayuda a reforzar el organismo en momentos en los que nos sentimos más débiles.
Perfecto para las épocas frías: en esas mañanas en las que sientes que nada te hará entrar en calor, una taza de café a buena temperatura te ayudará a recuperar tus niveles térmicos normales. Según la nutricionista, es fundamental saber qué es un buen café: «Tomarlo de forma saludable es posible. Debería prepararse con una cafetera de filtro o una cafetera italiana, pero sin quemar demasiado el café. La mejor manera sería calentar agua de calidad en dicha cafetera y luego añadir el café molido. Nunca voy a recomendar los añadidos como el azúcar o la leche, pero sí podríamos incorporar un poco de canela».
Asimismo, Paloma expone que deberíamos hacer un esfuerzo por consumirlo de manera saludable, evitando cualquier agregado innecesario: «En España considero que tenemos que empezar a consumir café de especialidad, que tenga trazabilidad y que realmente contenga estos antioxidantes».
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