first dates

Un comensal de First Dates fastidia su cita sin decir ni una sola palabra

"He pensado: tierra, trágame"

Noelia Bertol

Dicen que en la vida es mejor ir de frente y sin máscaras, aunque para Frantxu estas dos realidades se contraponían en su visita a First Dates. El comensal acudía a su cita con una máscara de luchador y un cinturón, mostrándose tal y como es ante la que podría ser el amor de su vida.

No obstante, su aparición estelar al grito de «lu-cha, lu-cha, lu-cha» con los brazos en alto quizá no fue la más acertada, pues causó el efecto contrario al esperado en su cita. «Hostia, no me jodas«, expresaba Mariví con cara de sorprendida desde la barra.

Ya en privado esta profundizaba más en los sentimientos que le habían aflorado al ver la entrada tan peculiar de su cita: «Yo me quería morir. He pensado: ‘Tierra, trágame’, me voy de aquí. Es que ha sido muy fuerte, con esa máscara y ese cinturón… casi me da algo«.


Mariví vio pronto truncados sus deseos de encontrar en el programa a su media naranja, y eso que aseguró que a ella de iba la marcha. Pero la lucha quizá era demasiado.

First Dates: una cita destinada a naufragar

 

A esta tampoco le gustó su cita físicamente. «Cuando se ha quitado la máscara tampoco me ha gustado físicamente. Es un poquito más alto que yo, pero es poquita cosa para mí«, confesaba. A pesar de todo y de tenerlo tan claro, Mariví aguantó y cumplió cenando con su cita.

A medida que avanzaba la cita a la comensal le servía para confirmar su primera impresión: Frantxu no era para ella. Sus aficiones chocaban con las suyas y, además, que este confesara tener un hijo de 7 años le terminó de echar totalmente para atrás.

«Voy a ser abuela y no quiero niños de otras. Los míos no los va a criar nadie, no voy a criar yo de otras«, confesaba. Como era de esperar esta terminó rechazando una segunda cita con Frantxu, a pesar de que este había aceptado la propuesta de volver a quedar con ella.

MÁS SOBRE: