Toda la verdad sobre el agua: engorda, adelgaza. Desmontando mitos

Carlos Rerucha

El agua es la única bebida con la capacidad de crear vida. Sin ella, nuestros órganos se debilitan y no funcionan con normalidad. Pero, ¿mejora la piel y adelgaza? Depende de cómo se vea, o se beba en este caso. Destapamos toda la verdad sobre el consumo del líquido elemento, en el que los expertos recomiendan un equilibrio, ni mucho ni poco.

Porque la sabiduría popular está bien, pero la ciencia es infalible. ¡Empezamos!

 


Cuando pensamos en beneficios clásicos que se le han atribuido al consumo de agua, siempre salen dos: mejora la piel y adelgaza. No es así, aunque la ausencia de ella sí podría llevarnos a tener la piel peor o a engordar. Como ya avancé anteriormente, todo depende de cómo se mire.

 

Beber agua NO mejora la piel

Según la doctora Paula Borregón, miembro de la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV), ««Lo primero que se debe entender es que en nuestra piel, como en todos los tejidos, se necesita un equilibrio entre el agua que hay dentro y fuera de las células».

Cuando se excede la ingesta diaria, las células se empapan y pueden aparecer edemas o hinchazón en la piel.

Pero no beber suficiente, la empeora

«Es peor beber de menos que de más», señala la doctora. Nuestro organismo, al verse desprovisto de agua para realizar sus funciones, puede robar la que hay almacenada en las células epidérmicas, provocando sequedad y arrugas con el tiempo si no se revierte la situación.

 

Beber agua NO adelgaza

Ni consumirla templada, ni con limón exprimido. Hay que tener en cuenta que el agua se elimina por el riñón y después se orina, nada más. No elimina la grasa, solo se recomienda en algunas dietas porque beber mucha «quita la sensación de hambre«, pero no deja de ser un inconveniente.

Para el correcto funcionamiento del metabolismo, se debe consumir comida y agua de forma equilibrada, sin abusar de ninguna de las dos partes.

Es más, los expertos dicen que si se abusa del consumo de agua, hay riesgo de que el estómago se dilate y se produzca el efecto de «las extremidades embotadas».

 

Cómo saber si estoy bebiendo la cantidad adecuada

El factor diferencial se encuentra en el color de nuestra orina. Si está muy oscura, bebe más. Si está muy transparente, a nuestro cuerpo le sobra agua.

¿Fácil verdad? ¡Más claro agua!

Y tú, ¿eres de las personas que bebe poca o demasiada? Ahora ya tienes toda la información para darle a tu cuerpo la cantidad necesaria de agua.

¡En el equilibrio está la virtud!

 

 

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